La pizarra: Confusión norteña
A diferencia del ya conocido 4-1-4-1 que mandó Marcelo Trobbiani, su colega de en frente, Roque Alfaro, envió un 4-línea-2, que por momento parecía un 3-3-2-2. La poca claridad en la formación sumada a las dificultades físicas de su equipo, hizo que en el primer tiempo se vea a un ahogado Derrick Debrah, que bajaba a conseguir la pelota. En la volante de creación, ni Israel Kahn por izquierda, ni Rubén Valladares por derecha podían pasar a la ordenada defensa cusqueña. Por otra parte, el equipo local contó con un correlón Luis Román Ojeda, que tuvo un ida y vuelta notable. En el medio por la derecha, Jesús Chávez estuvo siempre libre para recibir de sus compañeros, mientras que Carlos Olascuaga por izquierda fue un contaste peligro para el fondo sullanense. En punta se pudo ver a un espeso Sergio Ibarra, que peleó todos los balones con el colombiano Julián Carabalí en la primera etapa.
Los cambiazos: A ordenarse de vuelta
Alfaro notó los problemas de su equipo y en el descanso hizo ingresar a Nicolás Rizzo y Jesús Rey por los inoperantes Daniel Maldonado y Derrick Debrah. Asimismo, Trobbiani tuvo que retirar a un golpeado Sergio Ibarra por el nigeriano Tunde Enahoro. Esto hizo que Alianza Atlético tuviera más orden y llegada al arco imperial. Luego ingresaría Alfredo Rojas por Josimar Atoche para refrescar la zona de recuperación, mientras que Héctor Quintanilla tendría su oportunidad por Diego Bustamante en el Cienciano. Una vez que llegó el tercer gol y que Carlos Alaniz errara su penal, el técnico local le dio minutos al joven Tadashi Ortiz por Cristian Guevara.
El capo: Jesús Chávez
En un partido en el que Cienciano no tuvo que emplearse a fondo para conseguir la goleada, Chávez logró marcar por partida doble. Fue siempre rápido en repartir y desde la derecha complicó a su marcador Óscar Guerra. En el primer gol mostró habilidad para desmarcarse mientras que en el segundo aprovechó el desconcierto del equipo churre para marcar de media distancia. Una mención especial también merecen el portero Walter Noriega, quien atajó dos mano a mano y tapó un penal, y el lateral izquierdo Luis Román Ojeda que estuvo bien en la marca y mejor aún en las proyecciones, asistiendo a Chávez en el primer gol.
El extraviado: Daniel Maldonado
Lo del cuadro sullanense fue para olvidar, en especial en el primer tiempo. Ante un mar de malas actuaciones, la de Maldonado destaca por su intrascendencia. Casi no se notó su presencia. Si bien es cierto que por un tema físico es pesado jugar en Cusco, el delantero nunca incomodó a la defensa cusqueña, y las pocas que tuvo no las supo resolver. Casi en su mismo nivel estuvo Derrick Debrah, aunque el ghanés mostró colaboración con la volante y se mostró más participativo durante el tiempo que estuvo en cancha.
Jailaits
Sin trámite: El primer tiempo dejó la historia casi sentenciada. Cienciano comenzó mandando con la pelota y tras un claro penal cometido por Julián Carabalí, el capitán cusqueño Sergio Ibarra abrió el marcador. El cuadro imperial no se contentó, y aprovechando las dificultades físicas que mostraba su rival, llegó al segundo gracias a Jesús Chávez.
Más penales: El segundo tiempo comenzó con tres caras nuevas. Ibarra tuvo que salir e ingresó Tunde Enahoro. La visita se acomodó mejor gracias a los ingresos de Jesús Rey y Nicolás Rizzo. Cuando mejor comenzaba a jugar, Óscar Guerra comete penal, Cristian Guevara lo cambia por gol, dejando todo sentenciado. Cuando parecía que el cuento se terminaba, Raúl Penalillo le lanza un salvavidas a los sullanenses al cometer un tonto penal. Lamentablemente para la visita, Carlos Alaniz falla la pena máxima y termina de dejar por los suelos las esperanzas norteñas.
Jesús en rojo: En medio de la frustración por haber fallado el penal, Alaniz vio la segunda amarilla y dejó a su equipo a merced de una goleada lapidaria. Cienciano se sintió aún más cómodo, algo que pudo aprovechar Rey de contragolpe, aunque siempre se encontró con un seguro Walter Noriega. A falta de 10’ para el término del partido, una jugada con claras ocasiones de gol terminó en los pies de Chávez, quien remata rápidamente pegado al palo izquierdo de Reyes y puso el cuarto. La fiesta se coronaba en el Garcilaso.
A diferencia del ya conocido 4-1-4-1 que mandó Marcelo Trobbiani, su colega de en frente, Roque Alfaro, envió un 4-línea-2, que por momento parecía un 3-3-2-2. La poca claridad en la formación sumada a las dificultades físicas de su equipo, hizo que en el primer tiempo se vea a un ahogado Derrick Debrah, que bajaba a conseguir la pelota. En la volante de creación, ni Israel Kahn por izquierda, ni Rubén Valladares por derecha podían pasar a la ordenada defensa cusqueña. Por otra parte, el equipo local contó con un correlón Luis Román Ojeda, que tuvo un ida y vuelta notable. En el medio por la derecha, Jesús Chávez estuvo siempre libre para recibir de sus compañeros, mientras que Carlos Olascuaga por izquierda fue un contaste peligro para el fondo sullanense. En punta se pudo ver a un espeso Sergio Ibarra, que peleó todos los balones con el colombiano Julián Carabalí en la primera etapa.
Los cambiazos: A ordenarse de vuelta
Alfaro notó los problemas de su equipo y en el descanso hizo ingresar a Nicolás Rizzo y Jesús Rey por los inoperantes Daniel Maldonado y Derrick Debrah. Asimismo, Trobbiani tuvo que retirar a un golpeado Sergio Ibarra por el nigeriano Tunde Enahoro. Esto hizo que Alianza Atlético tuviera más orden y llegada al arco imperial. Luego ingresaría Alfredo Rojas por Josimar Atoche para refrescar la zona de recuperación, mientras que Héctor Quintanilla tendría su oportunidad por Diego Bustamante en el Cienciano. Una vez que llegó el tercer gol y que Carlos Alaniz errara su penal, el técnico local le dio minutos al joven Tadashi Ortiz por Cristian Guevara.
El capo: Jesús Chávez
En un partido en el que Cienciano no tuvo que emplearse a fondo para conseguir la goleada, Chávez logró marcar por partida doble. Fue siempre rápido en repartir y desde la derecha complicó a su marcador Óscar Guerra. En el primer gol mostró habilidad para desmarcarse mientras que en el segundo aprovechó el desconcierto del equipo churre para marcar de media distancia. Una mención especial también merecen el portero Walter Noriega, quien atajó dos mano a mano y tapó un penal, y el lateral izquierdo Luis Román Ojeda que estuvo bien en la marca y mejor aún en las proyecciones, asistiendo a Chávez en el primer gol.
El extraviado: Daniel Maldonado
Lo del cuadro sullanense fue para olvidar, en especial en el primer tiempo. Ante un mar de malas actuaciones, la de Maldonado destaca por su intrascendencia. Casi no se notó su presencia. Si bien es cierto que por un tema físico es pesado jugar en Cusco, el delantero nunca incomodó a la defensa cusqueña, y las pocas que tuvo no las supo resolver. Casi en su mismo nivel estuvo Derrick Debrah, aunque el ghanés mostró colaboración con la volante y se mostró más participativo durante el tiempo que estuvo en cancha.
Jailaits
Sin trámite: El primer tiempo dejó la historia casi sentenciada. Cienciano comenzó mandando con la pelota y tras un claro penal cometido por Julián Carabalí, el capitán cusqueño Sergio Ibarra abrió el marcador. El cuadro imperial no se contentó, y aprovechando las dificultades físicas que mostraba su rival, llegó al segundo gracias a Jesús Chávez.
Más penales: El segundo tiempo comenzó con tres caras nuevas. Ibarra tuvo que salir e ingresó Tunde Enahoro. La visita se acomodó mejor gracias a los ingresos de Jesús Rey y Nicolás Rizzo. Cuando mejor comenzaba a jugar, Óscar Guerra comete penal, Cristian Guevara lo cambia por gol, dejando todo sentenciado. Cuando parecía que el cuento se terminaba, Raúl Penalillo le lanza un salvavidas a los sullanenses al cometer un tonto penal. Lamentablemente para la visita, Carlos Alaniz falla la pena máxima y termina de dejar por los suelos las esperanzas norteñas.
Jesús en rojo: En medio de la frustración por haber fallado el penal, Alaniz vio la segunda amarilla y dejó a su equipo a merced de una goleada lapidaria. Cienciano se sintió aún más cómodo, algo que pudo aprovechar Rey de contragolpe, aunque siempre se encontró con un seguro Walter Noriega. A falta de 10’ para el término del partido, una jugada con claras ocasiones de gol terminó en los pies de Chávez, quien remata rápidamente pegado al palo izquierdo de Reyes y puso el cuarto. La fiesta se coronaba en el Garcilaso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario